¡ Hay hombros y hombros, eso está claro !. Hombros capaces de soportar sueños, llantos y alegrías, hombros capaces de infundir comprensión y transmitir esperanza, hombros amigos, en fin, que son buenos hombros.
¿ Quién no ha tenido la necesidad de apoyar la cabeza, alguna vez, en un hombro amigo ?.
No hace mucho que leí que alguien consideraba " los hombros como la parte más importante del cuerpo humano, pero no porque sean capaces de sostener la cabeza, entre otras cosas, a nivel anatómico, sino porque pueden alojar la cabeza de un amigo que llora ".
Creo que todos necesitamos de un hombro para llorar en algún momento de nuestra vida y lo importante es tenerlo al lado, apoyarse en una madre, en un padre, en un amigo/amiga y al encontrarlo, no solo lograremos desahogar nuestra congoja o alegría sino que obtendremos la enorme satisfacción de saber que no estamos solos.
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